HOWARD FAST “Los Judíos. Historia de un pueblo”, Por Javier O’Donnell
Los judíos. Historia de un pueblo, Howard Fast, Ediciones La Llave, 2018.
Javier O’Donnell
MADRID, 2 de FEBRERO 2019
Cuando se lee un libro sobre los judíos no puede dejar de experimentarse, todavía hoy, cierto estremecimiento. Es difícil mantener una normal neutralidad, un juicio desafecto, una natural curiosidad, porque sabe que en algún momento de la historia, uno va a tener que dar un paso atrás y abandonar la lectura para tratar de asimilar lo leído.
Eso es lo que sucede también con el libro de Howard Fast sobre los judíos, pero en su caso hay -sobre todo-, un determinado optimismo, una suerte de celebración que compensa el vacío que se experimenta según se va acercando a nuestros días en la historia de este pueblo de origen milenario.
Fast convierte en mágica por sus palabras, una historia que aunque fascinante por sus tentativas de erigirse singular en el hombre, muchas veces en ese peregrinaje, ha tenido que someterse a un principio de realidad en extremo cruel e insensible.
Del mismo modo una historia tan dilatada y tan llena de matices, encuentra en este relato una forma asimilada casi de carácter periodístico, sencilla y nada pretenciosa, ciertamente aclaratoria, que ayudará a legos y profanos a completar sus conocimientos sobre la materia y a fijar lo que antes podía oscilar en sus conciencias de forma imprecisa. Gracias a su estilo directo y ameno, Fast nos procura una mejor cercanía a los hechos para que éstos nos rebelen su potencia natural y su detalle.
Así también, el autor cuestiona a lo largo del libro creencias establecidas, muchas de carácter antisemita, que han servido de excusa para crímenes execrables o para generar historias dolorosas que han ido contribuyendo a hacer de una separación circunstancial, a veces decidida consciente o inconscientemente, una barrera infranqueable, cosificada y elevada a la categoría de ideología, tras la cual se ha parapetado a menudo el interés y la envidia.
Nos muestra igualmente cómo a la vez que se va escribiendo la historia de un pueblo, el judío como individuo va buscando consistencia en su propio destino, acomodándose a un entorno en muchas ocasiones extraño, con un fuerte aliado en su espíritu y visión trascendentes, a-históricas, -por así decir-, forjado en cualidades diferenciales y en un pacto comprometido con la libertad y el brillo intelectual.
Pero no en menor medida, Fast nos recuerda aquellos momentos en los que el judío no sólo olvida su condición, sino que se asimila de tal manera a la comunidad a la que pertenece que se vuelve uno mas, destacando como cualquier otro por sus cualidades personales o profesionales, momentos que nos hablan también de cierto sueño realizado, de una feliz satisfacción -la que experimenta cada hombre-, cuando es acogido y valorado por la comunidad a la que pertenece en un espacio y un tiempo determinados, al margen del flujo histórico en el que se halla inserto. Es estimulante y enriquecedor ver las transformaciones que se manifiestan al hacer acopio documental del curso especifico de acción de un grupo étnico o nacional determinado. El ir observando como interactua y se abre paso en la comunidad de hechos que configuran la historia universal, cómo se contagia de éstos al tiempo que va dejando su propia impronta y es en todo momento reconocido como un grupo independiente, manteniendo una identidad propia mientras resurge cada vez con sus nuevas particularidades. Ciertamente no es lo mismo un judío en la época romana, que un judío medieval, que uno en el periodo de entreguerras, o posteriormente en la edad moderna con la memoria colectiva del holocausto tras de sí. Es sin duda por todo ello un libro de una gran altura y a la vez muy ameno. Muy recomendable.
TEXTO DE JAVIER O’DONNELL
MADRID, 2 FEBRERO 2019
Howard Fast (1914-2003)